Encuentro fortuito
Hoy te vi. Había olvidado lo lindo que eras cuando pretendías contarme algo que me resultara interesante. Mientras te escuchaba me distrajeron tus pestañas, siempre me gustaron tus ojos tímidos víctimas de una vista incompetente. Cielos y estrellas sintiéndote amarrado a alguna parte de mi cuerpo. Hoy te vi y la magia aún no ha muerto.


Comentarios
Publicar un comentario