Por qué callan las lenguas
Una canción para escuchar
Por qué callan las lenguas, soy la mujer torpe. Olivia me dijo princesa verde, como el color de mi vestido del domingo, lejos muy lejos estoy de sentirme una princesa: se acerca mi cumpleaños y sé que tengo más desamor que años. Por qué callan las lenguas me hace acordar a Por quién doblan las campanas pero no, es una conexión arbitraria.
La lengua tan llena de bacterias que no queremos emitir palabra, preferimos guardar el silencio, mantenernos en un órbita quieta, distante, donde los planetas jamás se alinean porque jamás se hablan. Soy la mujer torpe, mi lengua está llena de bacterias y así es como tropiezo y me levanto, con mayor torpeza. Lo mío es falta de elegancia, me arrebato fácil y la ansiedad me hace tomar malas decisiones, algo parecido dice la canción.
Pero a veces, yo también callo y quedo mirándome de lejos como si fuera ese Hopper en la cama con la valija en el piso, el librito en la mano y la ventana diciendo "reaccioná mujer, hay sol"; marzo 2019 estuve frente a ese cuadro por mucho tiempo y sí, callo mi lengua, claro que por orgullo o vergüenza, son las dos causas trilladas para mantenerse en esa quietud impenetrable como si fuéramos plástico. He callado por amor, simulo muy bien -"vos manejás los sentimientos" solía decirme una amiga- pero te das cuenta, claro que te das cuenta, si tengo una boca del tamaño de mi puño y cuando estoy contenta mi sonrisa es más grande que la del guasón. Por qué callan las lenguas, qué les pasa que un día dejan de moverse como si no existieran. Despertar del letargo, puede que algunas se hayan quedado dormidas como se quedas dormidas las piernas, no sé.
La lengua tan llena de bacterias que no queremos emitir palabra, preferimos guardar el silencio, mantenernos en un órbita quieta, distante, donde los planetas jamás se alinean porque jamás se hablan. Soy la mujer torpe, mi lengua está llena de bacterias y así es como tropiezo y me levanto, con mayor torpeza. Lo mío es falta de elegancia, me arrebato fácil y la ansiedad me hace tomar malas decisiones, algo parecido dice la canción.
Pero a veces, yo también callo y quedo mirándome de lejos como si fuera ese Hopper en la cama con la valija en el piso, el librito en la mano y la ventana diciendo "reaccioná mujer, hay sol"; marzo 2019 estuve frente a ese cuadro por mucho tiempo y sí, callo mi lengua, claro que por orgullo o vergüenza, son las dos causas trilladas para mantenerse en esa quietud impenetrable como si fuéramos plástico. He callado por amor, simulo muy bien -"vos manejás los sentimientos" solía decirme una amiga- pero te das cuenta, claro que te das cuenta, si tengo una boca del tamaño de mi puño y cuando estoy contenta mi sonrisa es más grande que la del guasón. Por qué callan las lenguas, qué les pasa que un día dejan de moverse como si no existieran. Despertar del letargo, puede que algunas se hayan quedado dormidas como se quedas dormidas las piernas, no sé.
Creo que he sido respetuosa -aún hablando de ustedes- y ahora me encantaría saberlo, que regrese algún muerto vivo a contarme por qué quiso morir a medias dejándome torpeza acumulada para que se haga amiga de la tristeza, y por las noches, entre anotaciones en lápiz y sábanas sucias, se prometan fiesta, dejándome afuera.
Gracias por hacer capturas del último vivo de octubre, fue muy lindo.
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